Son pendientes colgantes que capturan la esencia de un atardecer vibrante, con tonos naranja y rojizos que se mezclan suavemente, evocando la calidez y la magia de la puesta de sol. El delicado toque dorado añadido a cada pieza aporta un brillo sutil, como los últimos rayos de sol reflejándose en el horizonte. Hechos de resina de alta calidad, estos pendientes son ligeros y cómodos, pero con una presencia impactante que aporta un toque de elegancia a cualquier look. Perfectos para quienes buscan un accesorio único y lleno de color.